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"Para cerote no se estudia"

Posted by: Johanna / Category:

Eran las nueve de la noche. Justo a tiempo para el “patín”, en la discoteca Ministry of sound, donde se vivió una noche extraordinaria: el aniversario de los santanecos de frigÜey. La experiencia comienza cuando los jóvenes bailan con demencia la tonada: “señorita a mí me gusta su style”, sin olvidar la barra libre y el reparto de luces fluorescentes. A un lado un alma que dice: “ese guitarrista es un cerote vos”. ¡Quién sabe por qué lo dijo!, ¿efectos del alcohol, tal vez?


La palabra “cerote” es un sustantivo grueso, que se utiliza en los sectores sociales. El término es: cerote o cerota (sin distinción de género). En la Real Academia significa: “pedazo de excremento”. En algunas ocasiones suele ser agradable y en otras insultantes. Se deduce, que “cerote” es una mezcla de cera o de pez y aceite empleado por lo zapateros para encerar el hilo de coser. En otras, se utiliza como sinónimo de drogo: “bien cerote se puso con la marihuana”, expresa el estado de absorber marihuana hasta quedar estúpido.


Entre amigos, en una relación muy sutil pero afectiva, se usa también la palabra “cerote”, como para puntuar la conversación (¡”hola, cerote…”!, ¡”veni vos, cerote”!). Muchas de estas expresiones suelen se muestra de plena confianza. Depende del entorno en que se desarrolle y la familiaridad que tenga la otra persona, así será la connotación de cariño. Cada vez, la palabra “cerote” tiene mayor auge, ya que, en algunos sectores, no existe una conversación sin emplear esta palabra. No obstante, la cultura tiene mucha importancia, puesto que, no todos los países tienen significado efectivo.


Sin embargo, decirle a alguien “cerote”, suele ser una especie de insulto: “No sos más que un cerote”. Expresa una situación de reducir a una persona en un pedazo de excremento. Hemos convertido su significado original en un arma de doble filo. Puesto que, “cerote” es, por decirlo así, un cero grande. Silenciamos su connotación, debido a la falta de léxico que manejamos.


En fin, el lenguaje salvadoreño se ha convertido en un mecanismo de palabras soeces que, para emplearlas, no tiene ninguna connotación social ni académica. Por tal razón, “para cerote no se estudia”. No nos extrañemos que este tipo de palabras caractericen a los salvadoreños en groseros. Puesto que, hablar y escribir mal, nos resulta fácil. No obstante, apoderarnos de nuevos matices y perseverar en un mundo desierto, depende sólo de nosotros.


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Decálogo de mi vida

Posted by: Johanna / Category:

a. Lo único permanente en la vida es el cambio.
b. Las cosas y la gente no son como nosotros queremos. Son como son.
c. Los malos libros provocan malas costumbres, y las malas costumbres provocan buenos libros.
d. El dinero no puede hacer que seamos felices, pero es lo único que nos compensa de no serlo.
e. La belleza está en los ojos de los que la ven.
f. No nos hace grande lo que tenemos, sino lo que compartimos.
g. En la vida no hay errores, sólo lecciones que aprender.
h. Aquel que no ha fracasado es porque no ha intentado algo nuevo.
i. Si deseas el éxito, no lo busques; dedícate a realizar lo que te gusta, el éxito vendrá por añadidura.
j. El que no ha probado lo amargo de la vida, no ha probado su dulzura.
k. Nadie sabe lo que puede lograr hacer, hasta que lo intenta.


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Me duele vivir la vida

Posted by: Johanna / Category:

Siempre me he preguntado cuál es el objetivo de existir en este mundo. ¿Acaso sólo se tratará de cumplir con el ciclo de la vida ( nacer, crecer, reproducirse y morir), ¿ ser felices?, ¿seguir nuestros sueños? Supongamos, ahora, que esos son los casos. Aunque yo le añadiría la bola de problemas y las muertes de nuestros seres queridos que se nos presentan para sobrellevarlos.

En lo personal, sé que tratar de vivir en una burbuja para obviar los aprietos no tiene ningún sentido, ya que los problemas te ayudan a ser mejor persona y a no volver a cometer los mismos errores. Por lo visto, la vida suele ser perfecta con sus dificultades, temores, felicidad, sufrimientos, etc. Sin embargo, considero que no es así. Por lo menos, no para mí. Me duele. No sé cómo se puede vivir con la idea de aceptar la vida tal y como viene, cuando has crecido con la imagen de tener un padre, y luego descubres que es una mentira. Porque sólo se trataba de un hombre que sedujo a una mujer, sembró una hija e ignoró el pan que apetecía y el amor que necesitaría en el alma.

No sé cómo sucedieron las cosas hasta la fecha, pero lo que sí puedo asegurar es que mi padre aprendió a introducir la culpa debajo de la alfombra y seguir adelante. Tenía que hacerlo. De otra forma, le resultaría agobiante. A veces creo que las personas inocentes tienen que pagar un precio para dar paso a un plan más grande. Yo tuve que ofrecer una vida llena de soledad, porque nacer no estaba en los planes de mi padre. Creo que haber nacido ha sido el peor premio que pudo recibir mi familia.

Sé que no soy la primera ni última persona por la que ha pasado todo esto. Sin embargo, mi dolor es aún más grande. No se compara con otro. Porque no sólo se trata de la ausencia de un padre, sino de una madre joven, que demuestra su amor y preocupación a través del dinero, la que siempre da ordenes, la obsesionada de la limpieza, la que grita por toda la casa, la que toma más de una taza de café al día, la que sale corriendo para su trabajo, etc. Creo que eso no es nada, también tengo que vivir con una señora de la tercera edad que lo único que le importante en su vida es el dinero. Una persona que siempre me repite: “No sirves para nada, te vas a quedar vendiendo tomates, nunca te vas a superar, no eres nada inteligente”. Sé que nadie me garantizo tener la mejor familia, la mejor ropa, casa, alimentación. En otras palabras, nadie me dijo que iba a hacer fácil vivir en este mundo desierto. Yo sé que no existe una escuela o universidad para enseñarles a nuestros padres a ejercer bien su papel en esta vida. Pero no se me hace justo que derramen sus amarguras, problemas, miedos y dolores sobre todo en los que no tienen la culpa de haber nacido.

Creo que por ahora sólo me queda seguir luchando por lo que amo. La verdad no se puede dar marcha atrás, cuando todavía no se ha terminado la batalla. Tal vez no ha logrado dar respuesta a mis inquietudes, pero una de las cosas que me quedó clara es que en esta vida tienes que ser fuerte, tener propósitos y dar lo mejor de uno a los demás. En esta ocasión, no voy a entregarte afecto, talento, técnica, pasión ni fe. Voy a darte lo mejor que tengo a través de mis escritos como lo he hecho hasta ahora. Seguiré expresando lo que pienso y siento sobre diferentes temas o simplemente relataré más de mi vida.


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"Siempre existe una primera vez para todo"

Posted by: Johanna / Category:




Una de las cosas que menos imaginé intentar fue escribir sobre mi persona. Nunca me ha gustado. Siento que me expongo al desnudo con los demás. Es un placer egoísta, diría yo. Tener un diario personal siempre me pareció una idea absurda, ya que en él se conserva todo lo bueno y malo que te ha pasado en la vida, desde una quitada de una muela hasta tu primera cita con el chico apuesto. Para qué escribirlo si después ya no tiene mayor importancia, porque toso eso pertenece a un pasado. Aunque admito que son buenos instrumentos para desahogarse, pero son muy malos consejeros. Por ello a mí me gusta vivir el presente, olvidar el pasado y pensar en el futuro.

No obstante, la vida me ha enseñado que ocultar mis sentimientos no es la mejor salida. Muchas personas pasan por situaciones similares a las mías y no puedo compartirlas con ellos, porque me niego a decírselos. Hoy en día, he tenido por primera vez la oportunidad de vaciar mi imaginación, creatividad y sueños en un escrito. Sí, tengo un diario. En él escribo todo lo que no le puedo confiar a un amigo. Creo en la privacidad de algunas cosas. Sin embargo, existen muchas posibilidades de que alguien lo encuentre y lo lea, pero es un riesgo que quiero correr. Porque creo que vale la pena escribir en él.

Siempre que escribo recuerdo las travesuras, lo enojos, los miedos, las vergüenzas que he pasado en público, mis pasiones y los desaires que me cuesta perdonar. Eso sin dejar a un lado esas molestas tildes, comas, puntos, puntos y comas, entre otros. Nunca pensé que fueran tan importantes, aunque todavía no manejo muy bien el uso adecuado de ellas, me dedico a practicarlo. Porque lo más fácil que existe en el mundo es hablar y escribir mal.

Hay momentos que antes obviaba de la vida y que ahora se han convertido en una realidad para mí. Entre ellas puedo mencionar: besar a un canino, pegar la lengua en el congelador, comer galletas para gato, beber de un retrete, pegar chicle en los pantalones de mis compañeros, etc.

En fin, creo que la vida es como un libro. Comienzas a leer una historia en un encadenamiento de escenas que te resultan fáciles de entender, pero luego de cambiar la página te sorprendes porque no esperabas ese final. Son casos extremos los que se viven, un día puedes poseer un carro lujoso y al siguiente día, no. A veces la vida parece estar sujeta a un sistema que nunca va a cambiar. Sin embargo, cambia. Siempre existe una primera vez para todo, si nunca tuviste la necesidad de pedirle ayuda a alguien, y ahora, no te queda más remedio que pedírsela a la persona que alguna vez se la negaste. Creo que nada es seguro en esta vida, y esa es una realidad que he aprendido de este mundo y que hoy he querido compartir contigo.


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Mi Diario

Posted by: Johanna / Category:





Lunes, 9 de febrero de 2009


Esta mañana, como no tenía clases en la universidad, me escape a la casa de una amiga. Confieso que pasar las mañanas en mi hogar no suele ser agradable, es más bien agotador. Creo que como todo adolescente he tenido que mentir para visitar lugares ilícitos. Bueno, no son tan malos. Porque visitar a una vieja amiga no me parece nada del otro mundo.

Aunque lo malo de mentir es que siempre existe un: ´´Yo la vi en…´´ Al parecer no es una tarea fácil escaparse de las personas delatadoras. Al menos, que tengas suerte. A veces me da miedo pensar que es poco el control que tenemos de la vida, y el resto dependa del azar. En fin, ese no es el punto. Luego de charlar con mi camarada y descubrir que tenemos muchas amistades en común, regrese a mi rutina: comer, cagar, comer, cagar, etc. Sí, mi vida no es tan interesante. Gran parte de ello se debe a que tengo una madre sobre protectora. Es horrible. No puedo hacer mayor esfuerzo para aventurarme.

Sin embargo, ahora tuve que hacer el papel de enfermera. Mi abuela (de parte de mamá), regresó del hospital y tenía que recibir los mayores cuidados, ya que la herida no había sanado por completo. Al principio, me pareció gracioso, pero después de unas horas, se volvió insoportable. Se comportaba peor que una niña de seis años. Pedía una taza de atole, un jugo de naranja, y luego ya no los quería. Ser enfermera de una señora de 62 años, me resulta frustrante. Creo que para rematar el día, tuve que compartir mi cama con mi prima menor. La verdad es una loca para dormir, y lo peor es que no contamos con el suficiente espacio para dormir tranquilas. Temo que mis dientes, tarde o temprano, van a saludar a cada ladrillo de mi habitación. ¡Qué vida la mía!

Martes, 10 de febrero de 2009

Creo que este día no se compara con ningún otro. Porque, en definitiva, fue el peor. Todo comenzó cuando regrese a casa, no tuve oportunidad ni de reposar un rato. Mi labor de enfermera me estaba esperando. Quisiera renunciar, pero no puedo. Es una obligación que tengo que cumplir. No me resultaría difícil obedecer si mi abuela no fuera tan terca. Cada día es más complicado entablar una buena relación con ella. Lo peor, no es eso, sino seguir al pie de la letra las indicaciones de mi madre. Es una perfeccionista con la limpieza. Quiere que guarde la ropa, limpie el modulo y la mesa, ordene las camas, lave los platos, entre otras cosas. Creo que un pulpo no es nada la par mía. A veces quisiera salir corriendo y gritar lo más fuerte posible, pero no me atrevo. Todo el santo día he dado piruetas y piruetas. Es una locura.

Lo único que pueda rescatar de este día es haber visto a un amigo. Bueno, antes no le veía de esa manera. Me enamore de él sin pensarlo, cuando estaba en octavo grado. Pero mi amor por él nunca fue correspondido, es una triste historia que no quiero recordar. Sin embargo, la vida nos ha vuelto ha unir en la misma universidad, aunque, las cosas ya no son como antes. Casi no cruzamos media palabra cuando nos vemos. Pero me alegró cada vez que lo veo. La verdad, no sé en qué vaya a terminar todo esto. Lo que sí puedo asegurar es que cuidar enfermos y a mi hermana se ha convertido en mi infierno.


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Graffiti = Vandalismo ¿Será verdad?

Posted by: Johanna / Category:








En los años de 1943, durante la II Guerra Mundial, en Túnez, se vio por primera vez el graffti: “Kilroy Was Here” (Kilroy estuvo aquí). La típica presentación muestra una cabeza y unas manos asomándose sobre el borde de una valla. Esta figura es conocida como Chad entre otros países. Sin embargo, en la actualidad a este tipo de graffti se le atribuye muchas críticas de “vandalismo” (inclinación de destruir y devastar todo, promover escándalos sin respeto ni consideración a los demás). Pero, ¿qué tan cierto es eso?
El término graffti proviene del italiano graffio: “arañazo”, que significa “marca o inscripción hecha rascando o rayando un muro”. El diccionario de la Real Academia Española recomienda el uso de la palabra grafito. También se le llama graffiti a las inscripciones que han quedado en las paredes desde tiempos del Imperio Romano. El grafito es, por decirlo así, un arte urbano.
A decir verdad, existe una gama de artistas en varios países que realizan este tipo de arte como una manera de comunicarse o dar estilo a su entorno sin ningún tipo de restricciones. Otros, simplemente buscan fama, ya sea pintando las mejores obras. ¿Será esto un vandalismo? Incluso, en El Salvador, el estilo original del grafito ha ido evolucionando en distintas formas de tipografía: el estilo Blockletter consiste en mayúsculas de gran legibilidad, el Wildstyle (estilo salvaje), de caracteres entrecruzados, el conocido Bubble Style (estilo burbuja) y el 3D o tridimensional.
No nos extrañemos de ver este tipo de grafito en los rincones de nuestro país, puesto que las técnicas y herramientas que se utilizan han tomado fuerza. El bote de spray, aerógrafo, pósters y pegatinas, por citar sólo algunos ejemplos, han ampliado el abanico artístico. Y eso sin olvidar la aparición del Internet, que ha desempeñado también un papel interesante en la evolución del grafito. Un ejemplo de ello es el sitio web Art Crimes, que se ha convertido en un espacio imprescindible a la hora de hacer llegar el talento de muchos escritores de grafito a un público más amplio.
En fin, el grafito no debe ser tildado como un “vandalismo”, porque se ha convertido en una nueva forma de expresión artística. Un talento de los jóvenes. No es benévolo ni nocivo. Sólo un arte urbano.


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"Recuerdos"

Posted by: Johanna / Category:





Hoy, he vuelto a recordarte. Bajo un atardecer, rodeado de árboles, olas de viento y el canto de las aves. Nunca imaginé que el silencio iba a ser la única forma de hablar contigo. Cómo hubiese querido despedirme de ti. Es que todo pasó muy rápido, en un abrir y cerrar de ojos. Yo crecí. Y llegaba la hora de poner en práctica todo lo que me enseñaste.

Mientras me preparaba para caminar por el mundo, tú seguías con la labor de enseñanza. Cuidaste a tu nieto como si fuera tu hijo. Estaba segura de que le darías los mejores ideales del mundo, como lo hiciste conmigo, pues, nunca dejaste de ser una persona responsable, disciplinada, práctica, metódica, prudente, y seria. Siempre pensaste que se merece luchar por aquello que es importante tener.

Valorabas las cosas conseguidas con el mayor esfuerzo. Y eso no es todo, cómo olvidar aquellos días, cuando llegaba a tu hogar y me preparabas el desayuno: fríjoles fritos, plátanos, queso y pan tostado. Todo eso, con tu toque especial. Y...cómo olvidar el refresco de avena con hojuelas. Delicioso. Me encantaba comer las hojuelas con la cuchara. Era divertido. Al llegar la tarde, me preguntabas: "¿Qué quieres comer en el almuerzo?". "No lo sé". "No, dime qué quieres, tu mamá dejó dinero para hacerte la comida". Siempre me consentías como a un bebé. Pero así, también, me llamabas la atención cuando me portaba mal.

También recuerdo mi primera clase de cocina. Me enseñaste a hacer pasteles de guineo y budín. Terminábamos, casi siempre, llenas de harina por todos lados, parecíamos fantasmas. A pesar de eso, nos quedaban deliciosos como para chuparse los dedos, diría yo. A mí me encantaba sólo el pastel y a ti ambos. Toda la familia degustaba tus platillos, en especial yo. Era tu "fan" número uno. Los fines de semana eran aún más divertidos. Visitábamos los centros de diversión: el parque de la familia, el zoológico, la puerta del diablo, etc. Creo que los lugares que conozco de mi país fueron gracias a ti. Algo que me enseñaste fue a apreciar de la vida: la naturaleza y el arte de la pintura.
Sin embargo, lo que más amábamos en la vida era esperar la época navideña. Siempre vestías tu casa con velas, música, el árbol navideño y el nacimiento del niño Dios. Antes de celebrar, me llevabas a la iglesia para agradecer por un año más de vida. Todos los 24 de diciembre, la pasábamos en familia. No era de menos. Teníamos que festejar tu cumpleaños.

Creo que nunca tendré las palabras exactas para agradecerte todo lo que haz hacho por mí. No tuve el tiempo suficiente para decirte cuánto te admiraba y apreciaba. Porque así como llegaste, así te fuiste. Fuiste un relámpago. Ahora ya entiendo por que te gustaban esos panes. Te esperé en mi cumpleaños, pero no llegaste. A los dos días, no podía creerlo, te habías marchado para ya no volver, me sentí en una pesadilla. Después de verte en tu eterno descanso, me marche. No obstante, una voz me invadió. Creí estar loca. No había nadie cerca de mí. Quién podía hablarme. No dejaba de repetir: "Empieza de nuevo con valentía y una sonrisa por mi memoria. No alimentes tu soledad con días vacíos, sino cada hora de manera útil. Extiende tu mano para confortar y dar ánimo, y a cambio yo te confortaré y te tendré cerca de mí y nunca, nunca tendrás miedo de morir porque yo estaré esperándote".
Y esas fueron sus últimas palabras que me consolaron. Ahora sólo me acompañan estos recuerdos, que siempre guardaré en lo más profundo de mi corazón. Tal vez no sean lo máximo, pero lo único que se lleva uno de las personas son los momentos que viviste con ella. Y eso me llevo yo.


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